La UAB, a ritmo de swing
La Fiesta del Swing tendrá lugar el 19 de abril de 13h a 15h. Este evento está organizado por Swing UAB, colectivo inscrito en ElDirectori, que suele participar en los actos organizados en el campus dinamizándolos con actos y talleres.
La Plaça Cívica acogerá el día 19 de abril la Fira Primavera (de 12 a 16 h.) y la Fiesta del Swing (13 a 15 h.)Lindy hop, Balboa, Collegiate shag, Boogie woogie y Lindy Charleston: todos son estilos del nuevo ritmo que últimamente está inundando la ciudad de Barcelona, el swing. Con 3,5 acontecimientos diarios, la suma de 5000 bailarines habituales y la apertura de cada vez más escuelas especializadas, queda claro que la gente ya no quiere sólo bailar en casa. Como no podía ser de otra manera, la UAB también participa en esta tendencia y, por primera vez, su colectivo inscrito en ElDirectori, Swing UAB, organiza la Fiesta del Swing. Este festival tendrá lugar el 18 de abril a lo largo de toda la jornada. Swing UAB también suele participar en muchos de los acontecimientos que se realizan en el campus, dinamizándolos con talleres y actuaciones.
El punto de partida de este baile son los años 20, en plena crisis económica, y al igual que la universidad, está caracterizado por la diversidad, puesto que surge como producto de la mezcla de culturas europeas y africanas que se asientan al sur de los EE.UU. Además, es transgresor. En primer lugar, la música jazz, y por lo tanto el swing, fue un arma para combatir la segregación racial, con el acceso de la comunidad negra a los escenarios. También sirvió como una herramienta de desobediencia durante el ascenso nazi, con la creación de los Jóvenes del Swing, que fueron perseguidos y finalmente masacrados en los campos de concentración.
Respecto al baile en sí mismo, se necesitan roles para poder hacerlo: uno tiene que dirigir y el otro tiene que seguir. Si bien es cierto que la norma suele relegar la mujer al papel de seguidora, es cada vez más frecuente que se realice de manera inversa, puesto que los bailes son también un reflejo de los cambios sociales. La versión queer del swing no pretende eliminar estos roles, puesto que son necesarios, pero cuestiona la relación directa entre rol y cuerpo. Esta dinámica se rompe para que cualquier identidad y expresión de género pueda asumir cualquier rol disponible. Por eso, el swing no fue sólo un motor del cambio durante el siglo XX, sino que también lo está siendo ahora.