Anicet Tibau: "Puedes tener obstáculos, pero gracias al apoyo de la gente y al esfuerzo diario, los puedes superar"
Anicet Tibau cierra su exitosa vinculación con la UAB tras cuatro años de apoyo cursando el doble grado de Física y Matemáticas. "Las adaptaciones han sido las necesarias para poder desarrollar la carrera con normalidad", afirma Anicet, que termina la carrera con una nota media de 8.9 y que continuará su formación en la prestigiosa universidad británica de Oxford.
13/11/2018
¿Por qué decidiste estudiar en la UAB?
Yo quería hacer el doble grado de Física y Matemáticas y sólo hay tres sitios en Cataluña donde lo hacen. Lo que me hizo decantar la balanza fue que en el Salón de la Enseñanza me atendió un chico muy simpático que estudiaba este doble grado, me habló muy bien y me convenció rápidamente.
¿Conocías el Servicio de Atención a la Discapacidad (PIUNE) antes de entrar en la Universidad?
Mi caso es especial. A mí me diagnosticaron la retinosis pigmentaria quince días antes de comenzar las clases en la universidad. Lo primero que hice fue entrar a la ONCE y desde allí me hablaron del PIUNE, donde vimos en qué cosas me podían apoyar.
¿Como ha sido tu relación con el PIUNE desde que llegaste a la UAB?
La relación ha sido bastante regular. Fijamos las adaptaciones desde el primer día y se han mantenido porque no he tenido cambios en mi afectación. Durante mi carrera he tenido que trabajar en el laboratorio, en una práctica concreta del curso pasado tuve que trabajar a oscuras, lo que me complicaba mucho el trabajo, y a través del PIUNE y del Centro de Recursos Educativos (CRE) de la ONCE, hablamos con el profesor y pude realizar esta práctica sin problemas.
¿Crees que has podido hacer el seguimiento de tus estudios al 100%?
Sí. En todas las adaptaciones el profesorado se ha ajustado muy bien y han sido las justas y necesarias para poder desarrollar la carrera con normalidad.
¿Qué tipo de adaptaciones has necesitado?
Yo tengo baja visión, pero lo que más me afecta es la reducción del campo visual y eso a la hora de estudiar no afecta mucho. En los laboratorios, como he comentado antes, sí afecta, pero he podido contar con una alumna de apoyo con la que hacía las prácticas y los profesores también han estado más encima mío, para saber si entendía donde estaban las cosas. En cuanto a las asignaturas más teóricas, como la afectación también provoca fatiga visual, las adaptaciones que acordamos fueron la letra más grande de los exámenes, un tercio más de tiempo para realizarlos y, sobre todo, la posibilidad de sentarse en primera fila en las clases y tener cualquier material de la asignatura adaptado, para evitar forzar demasiado la vista.
¿Cómo te surgió la inquietud por estudiar el doble grado de Física y Matemáticas?
Básicamente es una historia de amor. Me gustó mucho cómo se podía describir todo tan bien y como se podía experimentar. La mezcla entre mi pasión por describir y entender el mundo y la facilidad matemática que tenía para seguir y entender los argumentos, me hicieron llegar a la conclusión de que quería ser físico-teórico y que por eso también necesitaba estudiar matemáticas.
¿Y has terminado el doble grado de 5 años en sólo 4, como lo has hecho?
El primer año en la universidad me lo tomé de adaptación, no tuve que estudiar mucho para tener notas satisfactorias. Como tenía muy claro que me interesaba la cuántica, cursé la asignatura de este tema que se hace en tercero, en segundo curso, lo que me permitió entrar en un centro de investigación ese mismo verano. Allí me di cuenta que me encantaba y que lo que realmente quería era trabajar en un centro de investigación.
Cuando tocó hacer la matrícula de tercero, intenté coger la asignatura optativa sobre información cuántica y no pude por las normas de la Facultad. En este punto, y gracias a la propuesta de un compañero, decidí -con el permiso del decano de la facultad- hacer los tres cursos que me quedaban en sólo dos, por lo que tenía más de 90 créditos por curso. Y aunque las notas se resintieron, finalmente he terminado la carrera muy contento con un 8,9.
¿En qué campo quieres trabajar?
He tenido la oportunidad de trabajar en centros de investigación en el campo de la información cuántica. Ahora ya he aprendido bastante de este campo, aunque nunca se sabe bastante, pero ya entiendo la idea básica. Ahora lo que me motiva es la gravedad cuántica, que es el campo que une la teoría de la gravedad de Einstein con las diferentes teorías cuánticas que existen. Pero en la vida nunca se sabe, hoy me interesa esto y dentro de unos años quizás cambio.
¿Cuáles son los próximos pasos que harás en tu carrera?
Mi objetivo inmediato es hacer investigación pura. La opción clásica para llegar allí es hacer una carrera puramente académica, por lo que ahora empezaré un máster en Oxford y la idea es seguir con el doctorado, los tres años de post doctorado y luego intentaré buscar un grupo de investigación donde me encuentre bien y me cojan.
El sueño es tener un puesto de trabajo fijo aquí. Esto ahora mismo es imposible y aprovecharé para viajar por el mundo, que también puede ser interesante. De momento me tengo que concentrar en hacer el máster en Oxford y ver si me quieren para hacer el doctorado allí.
¿Cómo has llegado a Oxford?
Yo tengo muy claro que quiero estudiar la gravedad cuántica y hice la solicitud para cursar tres másteres que satisfacían mis expectativas. Finalmente, tuve la posibilidad de entrar en la Universidad de Nottingham o en Oxford y me decanté por esta última porque está más reconocida internacionalmente.
El máster es en física teórica y me dan muchísima flexibilidad para elegir las asignaturas que más me gustan. Hay bastantes asignaturas enfocadas a la investigación donde los métodos de evaluación no consisten sólo en hacer exámenes, lo que me gusta bastante.
¿Desde Oxford también te apoyarán en el seguimiento de las clases?
Desde que haces la solicitud ellos tienen en cuenta si tienes algún tipo de necesidad y luego cuando te aceptan ya se ponen a trabajar para conseguirte un lugar de residencia adaptada. También te proponen un plan de apoyo con algunas adaptaciones que consideran que pueden ser buenas para ti y están abiertos a nuevas propuestas. Hasta donde he podido ver, en Oxford son bastante activos y tienen un departamento bastante similar al de la UAB, aunque, a priori, con más recursos.
¿En qué punto ha sido más importante para ti el apoyo del PIUNE?
Las prácticas en laboratorios habrían sido imposibles sin el PIUNE. Las adaptaciones a las aulas las podría haber superado solo, no con estas notas, pero con esfuerzo y la ayuda del profesorado hubiera salido adelante. Está claro que con el apoyo del PIUNE y del CRE de la ONCE, que tienen una coordinación perfecta, he podido hacer las cosas como tocaba.
¿Qué referentes tienes en tu sector?
Referente como persona con la que he tenido contacto y me ha animado a seguir por este camino he tenido dos. Todo el profesorado de la carrera me ha ayudado bastante, pero he tenido dos con los que he tenido más relación y sí que me han hecho ver que tenía nivel para hacer esto. Uno de ellos es el coordinador del Grado de Matemáticas, Wolfgang Pitsch, y el otro es un profesor de física teórica, Emili Bagán.
Por otra parte, también tengo ídolos, entendidos como referentes a los que te quieres acercar. Aquí también tengo dos: un científico muy popular dentro de su especialización, Richard Feynman, porque él tenía esta idea de que la física se debe entender y explicar de muchas maneras diferentes y también tenía la capacidad de reducir las grandes cuestiones a problemas simples. Por otra parte, otro ídolo es el archiconocido Stephen Hawking, pero no sólo porque el campo en el que nos movemos es el mismo, sino también porque me sirvió de motivación. Si él con las barreras que tenía fue capaz de hacer ciencia de esta calidad, yo con las barreras que tengo, puedo hacerlo perfectamente. Puedes tener obstáculos, pero gracias al apoyo de la gente y al esfuerzo diario, los puedes superar.