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El próximo mes de octubre se cumplirán los 40 años del inicio de las actividades en nuestro campus y desde entonces éste ha sufrido cambios espectaculares. De aquellas zonas yermas, terrenos fangosos y edificaciones uniformes, se ha pasado a disponer de espacios ajardinados entre una arquitectura diversa, rodeada de cultivos y de bosque. Sin embargo, a pesar del esfuerzo invertido en la mejora y conservación de nuestro campus en los últimos años, el conocimiento que tenemos y el uso que hacemos es muy pobre, todo ello ante el hecho de que pocas universidades de nuestro entorno disponen de un recurso como este y tan a nuestro alcance.

Con el objetivo de incrementar el conocimiento de nuestro campus, para valorarlo y para utilizarlo para nuestro provecho, desde la Oficina de Medio Ambiente se diseñó una red de caminos que recorre todo el largo y ancho del campus, con la intención de dar a conocer lugares singulares, algunos de ellos poco conocidos para la comunidad universitaria.

El diseño parte de las dos rutas existentes: los itinerarios de naturaleza azul y rojo, los cuales se han complementado con cuatro itinerarios más que interconectan entre ellos para configurar una red de caminos que se extiende y se adentra por los tres pequeños valles conformados por las rieras de Can Miró, Can Magrans y Can Domènec, antiguas masías que dominaban la zona que actualmente ocupa nuestro campus.

En esta propuesta de itinerarios encontramos el recuperado antiguo camino a Can Miró (ruta marrón), la actual sede de la Escuela de Postgrado. Esta ruta sigue el camino original de Bellaterra a la masía y que coincide en la primera parte de la añorada ruta de Ho Chi Minh, por donde nuestros primeros y esforzados universitarios accedían desde la estación de Bellaterra de los FGC a las Facultades . El nuevo trazado de la vía de los FGC, al abrirse la estación del campus, cortó la ruta Ho Chi Minh justo en la entrada de las casas Sert, desde donde el camino seguía hacia abajo por la orilla del torrente de Can Miró hasta llegar casi a la plaza cívica. El antiguo camino a Can Miró sigue por detrás de las casas Sert hasta acceder a la masía.

En la masía de Can Miró confluye también una ruta interior (ruta magenta), que nos lleva por rincones singulares de la zona académica del campus, siguiendo las dos vertientes del valle de Can Magrans y disfrutando de miradores alzados, de zonas ajardinadas con puestos de interés como son el jardín oriental de Educación y el jardín kokoro de Traducción e Interpretación, disfrutando de las obras escultóricas de diversos autores esparcidas a lo largo del recorrido y contemplando, según la época del año, las orquídeas silvestres que crecen en rincones concretos.

En el lugar de entrada al campus por la carretera que une Bellaterra con la zona del rectorado, se encuentra el punto más alto del campus (180 m), que es donde confluyen dos rutas: el itinerario de naturaleza azul y la ruta amarilla. La ruta amarilla es una nueva propuesta que de hecho sigue el GR-173, una ruta de gran recorrido que atraviesa el Vallès Occidental y que pasa por el campus.

En fin, la red se completa por las dos rutas, la azul celeste y la roja, que se encuentran en la vertiente del torrente de Can Domènec y que nos permiten observar cultivos, zonas con hierba donde pastan rebaños y zonas salvajes de bosque maduro y pasear junto a un frondoso bosque de ribera.

Cada una de las rutas que se proponen se pueden recorrer en 25-35 min a buen paso, lo que constituye una actividad física diaria muy saludable. Por otro lado, el establecimiento de una red de caminos interconectados como la que se propone, permitirá que cada uno se pueda diseñar su itinerario a su conveniencia. La intención es poner al alcance la información de cada ruta relativa a distancias, tiempos y lugares de interés. El objetivo es que se utilice el campus para promover la actividad física y dar a conocer los recursos naturales y artísticos de nuestro campus, no sólo en beneficio de la comunidad universitaria, sino también de la población vecina, en particular de los vecinos de Bellaterra y del barrio de Serraparera que, desde diferentes puntos del campus, tienen un fácil acceso a las rutas.

Uno de los aspectos relevantes de nuestro campus es el de disponer de amplias zonas donde predomina el verde y que nos permiten relajar nuestros sentidos mientras paseamos. Los beneficios de esta actividad, conocida como ejercicio verde han sido comprobados en estudios recientes llevados a cabo por investigadores de la Universidad de Essex, en los que se ha puesto de manifiesto que el contacto con lo verde mientras se pasea, mejora notablemente la salud fisiológica en reducir los niveles de estrés, incrementando el buen humor y la autoestima (http://www.greenexercise.org/). Estos efectos beneficiosos para la salud física y mental ya aparecen andando 5 minutos, sobre todo en la gente joven y en personas con problemas mentales.