Avances en la lucha contra la tuberculosis
La tuberculosis se una amenaza para la salud desde hace m�s de 15.000 a�os. Son bien conocidos los estragos ocasionados por la enfermedad en Europa al siglo XIX coincidiendo con la revoluci�n industrial. En los pa�ses desarrollados, como consecuencia de la mejora en las condiciones de vida, la incidencia de la enfermedad empez� a bajar de forma notable a mitad del siglo XX, incluso antes de que al 1940 se desarrollara el primer f�rmaco eficaz por su tratamiento, la estreptomicina.(99) Este descenso fue continuo hasta el a�o 1985 d�nde, coincidiendo con la pandemia de SIDA, se invirti� la tendencia. Otros factores que han influido en este resurgimiento han sido el desmantelamiento de los programas de control, la recepci�n de inmigrantes proviniendo de pa�ses con alta incidencia, o las bolsas de pobreza existentes a las grandes ciudades. En los �ltimos tiempos, la dificultad para controlar la enfermedad se ha visto incrementada por el problema de la resistencia, multiresistencia o resistencia extrema a los f�rmacos antituberculosos.
Con objeto de cortar la cadena epidemiol�gica es importante conseguir la detecci�n precoz de los casos y asegurar la adherencia de los enfermos al tratamiento terap�utico. La tuberculosis resistente es especialmente problem�tica en las �reas donde no existe la posibilidad de hacer antibiogramas, puesto que la falta de informaci�n puede dar lugar a tratamientos inadecuados que agraven el problema.
El estudio de la sensibilidad a los f�rmacos antituberculosos se basa en el an�lisis de la proporci�n de mutaciones resistentes que hay a la poblaci�n. Este estudio se hac�a inicialmente en medio s�lido (tubos de L�wenstein-Jensen), pero ya a los a�os 80 se adapt� un sistema l�quido, con detecci�n radiom�trica del crecimiento con C 14, que ha sido el referente los �ltimos 20 a�os. A pesar de esto, el hecho de trabajar con is�topos radioactivos implica disponer de una unidad controlada por la Junta de Energ�a Nuclear y de un sistema de eliminaci�n de residuos. Por eso, �ltimamente se han desarrollado antibiogramas en sistemas de cultivo l�quido con detecci�n calorim�trica del crecimiento. Por otro lado, el estudio de la sensibilidad a la pirazinamida es especialmente problem�tica, dado que se tiene que hacer en un medio con pH �cido (pH 5,5) que dificulta el crecimiento de la bacteria. En este trabajo hemos comparado uno de estos sistemas l�quidos no radiom�tricos (BacT/ALERT PZA) con el sistema radiom�trico (BACTEC 460TB PZA), obteniendo una correlaci�n del 100%. La conclusi�n ser�a, por tanto, que se puede utilizar con confianza este sistema l�quido no radiom�trico analizado para sustituir el sistema radiom�trico.
Servei Microbiologia Hospital de Sant Pau i la Santa Creu
Referencias
"Evaluation of the BacT/ALERT PZA kit in comparison with the BACTEC 460TB PZA for testing Mycobacterium tuberculosis susceptibility to pyrazinamide" Aragon, LM; Garrigo, M; Moreno, C; Espanol, M; Coll, P. JOURNAL OF ANTIMICROBIAL CHEMOTHERAPY, 60 (3): 655-657 SEP 2007